En lo que se perfila como una de las temporadas de Fórmula 1 más reñidas en años, Lando Norris, piloto de McLaren, ha ofrecido una perspectiva clave sobre lo que, a su juicio, será el factor decisivo en la contienda por el campeonato de 2025: la minimización de errores. Para Norris, cuya propia campaña ha estado marcada por desafíos y lecciones, la velocidad pura cede protagonismo ante la consistencia y la precisión.
Norris, inmerso en una notable rivalidad interna con su compañero de equipo, Oscar Piastri, ha sido contundente: “Quien gane esta temporada dependerá de quién cometa menos errores”. Esta afirmación, realizada en el contexto del Gran Premio de Spa, subraya la alta presión que enfrentan los pilotos en cada sesión y cada vuelta.
El propio Norris no ha estado exento de tropiezos. En su análisis post-carrera en Spa, el británico admitió que su rendimiento no estuvo a la altura de su potencial máximo debido a una combinación de errores de configuración y decisiones estratégicas con la batería. Específicamente, mencionó fallos en las últimas dos curvas del circuito, además de una configuración de batería que, según él, favoreció a Piastri y le hizo inevitable ser adelantado.
El piloto de McLaren, reconoció que algunos de sus desaciertos al inicio de la temporada se derivaron de expectativas de rendimiento excesivamente ambiciosas. Sin embargo, enfatizó haber aprendido una valiosa lección: a veces, un 95% de esfuerzo en una vuelta puede ser suficiente para asegurar una pole position o un segundo puesto, mientras que intentar alcanzar el 101% no siempre rinde frutos. Esta madurez en su enfoque táctico podría ser crucial para las próximas carreras.
Al ser consultado sobre si el actual campeón, Max Verstappen de Red Bull, podría reincorporarse a la lucha por el título, Norris fue cauteloso pero optimista sobre sus propias posibilidades: “Nada es imposible. Pero ahora tenemos un mejor coche y un mejor equipo”, sentenció, dejando entrever la confianza que McLaren ha ganado.
Analizando la compatibilidad con su monoplaza, Norris comentó que el McLaren de este año presenta una dinámica de conducción distinta a la de temporadas anteriores. Reconoció haber experimentado dificultades en circuitos donde la parte delantera del coche soporta una mayor carga, señalando la “sensación de la dirección” como un aspecto particularmente crítico en trazados como China y Mónaco. Asimismo, lamentó que su error al entrar en boxes y una parada lenta le costaron un total de cuatro segundos cruciales. A pesar de estos contratiempos, el joven británico aseguró que el equipo ha tomado nota y está trabajando diligentemente para corregir estas deficiencias.
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