El alcalde del condado de Miami-Dade en Estados Unidos, Carlos Giménez, vetó una resolución que bloqueaba la realización del Gran Premio por el uso de carreteras alrededor del estadio Miami Dolphins.
Esta medida permite que los debates continúen con respecto a la celebración del Gran Premio de Florida, planificado para 2021, si todo sale bien.
“Veté esta resolución que impedía la celebración del Gran Premio según lo planeado para 2021”, anunció Giménez. “Esta semana, me reuní con residentes de Miami Gardens, funcionarios del estado y otras personas preocupadas por el ruido y la contaminación generados por este evento. Continuaremos trabajando por un acuerdo que beneficie a los residentes, los aficionados y a la economía de nuestro condado”, añade.
Giménez justificó su decisión asegurando que sería “prematuro bloquear un evento deportivo de tal magnitud como el de un Gran Premio de Fórmula”.
Agregó, “Quise poner este veto para reiniciar los debates de manera neutral. “Estoy convencido de que un Gran Premio de Formula 1, una carrera de clase mundial debe llegar a nuestra comunidad”.
Pero no es el único obstáculo que podría frenar la realización del Gran Premio en Miami y es que políticos locales, como el alcalde de Miami Gardens, Oliver Gilbert, que ha expresado su descontento: “Entendemos que somos parte de un gran ecosistema económico, lo sabemos, solo queremos que este ecosistema económico entienda que vivimos aquí y cada gran evento no es un gran evento para nosotros”.
Y es que los habitantes son los primeros en oponerse, ya lograron cancelar el primer proyecto y también una carrera de Fórmula E. Se oponen firmemente a un circuito alrededor de Hard Rock Stadium, donde juega el equipo de Miami Dolphins NFL.
Al consultar residentes, Janice Smith, una ribereña opinó: “No se puede escuchar nada en casa cuando juegan los Dolphins. Nos sentimos irrespetados, insultados e ignorados”
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