El cierre de la temporada 2025 de la Fórmula 1 no solo dejó a Lando Norris como el nuevo monarca de la máxima categoría, sino que también reavivó un intenso debate sobre la conducta de los aficionados. Jacques Villeneuve, campeón mundial de 1997, ha alzado la voz para defender al piloto de McLaren tras las constantes muestras de hostilidad que este recibió en la recta final del campeonato.
A pesar de asegurar su primer título mundial en Abu Dhabi, superando a su compañero Oscar Piastri por 13 puntos, Norris tuvo que lidiar con abucheos en podios recientes como los de México y Brasil. La raíz de este descontento parece residir en una parte de la afición que percibe un supuesto favoritismo de la escudería de Woking hacia el británico. Villeneuve, conocido por su estilo directo, calificó estas reacciones de inaceptables en el High Performance Podcast. “Esto es realmente ridículo. Fue vergonzoso ver abucheos en algunas carreras. Nunca se debe abuchear a un piloto que corre limpio en la pista, no le falta el respeto a nadie y, de hecho, es muy rápido. ¿Qué le está pasando a la gente? Esto es realmente vergonzoso”, sentenció el canadiense.
Para Villeneuve, el éxito de Norris no es producto de favores internos ni del azar, sino de un rendimiento sólido que se consolidó tras el parón veraniego, igualando la tendencia que ya había mostrado el año anterior. “Si Piastri fuera un segundo más rápido por vuelta y Norris ganara por pura suerte o por los problemas de otros pilotos, se podría decir: ‘Bueno, esto no es justo’. Pero no fue así. Norris también fue rápido desde el principio en la segunda mitad de la temporada, igual que el año pasado”, analizó el ex piloto de F1.
El canadiense, también reflexionó sobre la psicología del fanático moderno, señalando que la pasión a menudo nubla el juicio técnico sobre lo que ocurre en el asfalto. Mencionó que, si bien Piastri tuvo momentos de superioridad y mejor fortuna mecánica en la primera mitad del año, el campeonato se define por la consistencia total. “Este es el precio que pagamos en la era de las redes sociales y con el gran crecimiento de la Fórmula 1. La afición es muy apasionada. A veces, esa pasión se convierte en fanatismo y a la gente le cuesta ver la realidad. Si tu equipo favorito no gana, tiendes a pensar que la culpa debe recaer en factores externos. Pero no hay nada concreto que lo respalde”, explicó Villeneuve.
Finalmente, Jacques Villeneuve subrayó que, aunque las críticas son parte del deporte de élite, el nivel de toxicidad actual exige que los pilotos desarrollen una resiliencia extrema. “Esto es pura afición, y siempre lo será. Los pilotos de élite necesitan tener la piel dura. Si te gustan los elogios, tienes que ser capaz de aceptar las críticas. Hay dos caras de la moneda”, concluyó.
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